viernes, 9 de enero de 2009

los adioses

Esta noche fue la despedida, fue muy especial, eramos los 20 intimos y pude hablar un ratito con todo el mundo.
Lo que no sabéis es que hice una marmita de chocolate que tuve que tirar, no estaba a lo que tenia que estar y se me quemó. Tuve que hacerlo otra vez y volvió a quemarse, aunque solo se notó un poco en la tercera.



Es imperdonable que llegase tarde a mi propia fiesta pero quería despedirme de tres chicos y no me di ni cuenta de que el tiempo pasaba y yo seguía hablando, cuando llegue todos me esperaban.
Me encantó ver la casa llena de gente, todos hablando muy animados, probablemente cortándome un traje, pero en un momento se hizo el chocolate, se cortaron los roscones, se abrieron las pastas que llegaron de Jaén (estaban tan buenas que no sobró ni una), y ya estábamos nuevamente todos juntos charlando alrededor de una mesa.
y como no fotos comiendo.
Revisando las fotos de navidad en mi casa, con mi hermano, nos dimos cuenta de que solo hacíamos fotos alrededor de la mesa, comiendo cenando desayunando un café a media tarde... Solo nos juntábamos para comer.

Pensaba que sería parte de nuestro gen gallego pero veo que en Madrid últimamente nos juntamos para lo mismo o para otras cosas pero en las fotos solo se nos ve alrededor de una mesa.

Capitulo aparte merece el tema regalos de amigos invisibles, aunque yo les pude poner cara, nombre y apellidos creo que me dais más de lo que merezco. Pero no por eso lo voy a devolver es mio y muy mio. Muchas gracias a todos por los regalos son y sois increíbles y cuando llegue a Dublín pienso presumir de regalo y escote. Sois lo mas grande y no la jurado.

1 comentario:

Mocho dijo...

dubidubidúúúú